Lección 02: Obras personales del Espíritu Santo.
El Padre y Cristo nos enviaron al Espíritu Santo (Jn.14:26; 14:26; 16:7) para ayudarnos en todo aquello que tiene que ver con nuestra práctica de la fe cristiana. Él es nuestro principal auxiliador para nosotros en esta era. Cristo le llamó, repetidas veces, “el Consolador” (Jn.15:26). ¿Pero cómo podría ser “el consolador” si no fuese una persona?
Anteriormente demostramos que el Espíritu Santo es una persona porque posee los tres atributos básicos de personalidad. De no ser así, estaríamos creyendo (al igual que los Testigos de Jehová, miembros de la nueva era, o panteístas), que el Espíritu es simplemente una fuerza o energía, y hasta que forma parte de la naturaleza.
Sin embargo, la Biblia
no presenta al Espíritu como una fuerza o poder impersonal. Más bien lo
presenta con características y atributos de una persona, y ejecutando obras o
acciones personales (Hechos 10:19,20; 16:6).
Y de eso queremos hablar ahora. Vamos a poner en lista todas las acciones y
obras que el Espíritu realiza como persona:
Acciones que sólo hace una persona:
1. Es
capaz de hablar (Hch.1:16; 8:29)
2. Es
capaz de orar e interceder (Ro 8:26)
3. Da
mandatos claros (Hch.1:2)
4. Es
capaz de enseñar (Jn.14:26; 1Co.2:13)
5. Refrena
o contiende (Gn.6:3)
6. Realiza
milagros (Hch.8:39;Ro.1:4; Hch.10:44-46)
7. Anhela
y siente celo (Stg.4:5)
8. Escudriña
(1Co.2:10)
9. Se
pone de acuerdo (Hch.15:25, 28)
10.Prohíbe
(Hch.16:6- 7)
En cuanto al evangelio:
1. Inspiró
las Escrituras (2Pe.1:21)
2. Puede
convencer a las personas de pecado (Jn. 16:8-11).
3. Brinda
su poder para el evangelismo y servicio (Hch. 1:8; Lc.4:14)
4. Testifica,
da testimonio de Cristo (Jn. 15:26)
5. Lava,
santifica y justifica a los que creen (1Co.6:11)
En cuanto a los creyentes:
1. Bautiza
a los salvos en el cuerpo de Cristo (1Co.12:13).
2. Mora
(habita) permanentemente en los creyentes (Ro. 8:9; 1Co.6:19)
3. Guía
a los hijos de Dios (Ro. 8:14)
4. Ilumina,
brinda entendimiento de las cosas espirituales (Ef. 3:16-19; 1Co.2:14-16)
5. Consuela
o ayuda a los cristianos (Jn. 14:16-18)
6. Les
provee seguridad de salvación (Ro.8:16)
7. Manifiesta
su fruto en el carácter del creyente (Gá.5:22-23)
8. Llena
(controla, conduce) la vida del Cristiano (Ef.5:18)
En cuanto al Ministerio:
1. Llama
al servicio misionero (Hch.13:2)
2. Puso
a los ancianos (pastores) como obispos en la iglesia (Hch.20:28).
3. Envía
para labores especiales (Hch.13:4)
4. Reparte
los dones a la iglesia (1Co.12:11)
5. Conduce
a la verdad (Jn.16:13)
6. Provee
de unción para la enseñanza (1Jn.2:20,27)
7. Otorga
poder para la predicación de la Palabra (1Co.2:4)
8. Provee
de unidad al cuerpo de Cristo (Ef.4:3)
9. Detiene
o frena la obra de satanás en el mundo (2Ts.2:6-7)
CONCLUSIÓN:
Debido al tipo de obras y acciones que el Espíritu Santo realiza, concluimos que Él es una persona. Y además que, es una persona realmente maravillosa.
La aplicación que
podríamos sacar de todo esto, es reflexionar en el hecho de que el Espíritu
siempre está activo; mientras usted duerme Él sigue haciendo la obra en el
mundo. Y vela por usted, siempre está dispuesto a enseñarle, es el maestro de
horario completo. Es nuestro consejero fiel, nos reprende, pero también nos
consuela. Aprendamos a seguir su dirección incansablemente.
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